:EL REFERENDO COLAPSÓ

POR: RAUL PACHECO BLANCO: ( raulpachecoblanco. blogspot.com )

Razón tenía el senador Alirio Villamizar cuando señalaba que el referendo había colapsado. Y no propiamente por razones jurídicas, pues el trámite se ha ajustado a los cánones legales, por cuanto se presentaron las firmas recogidas entre el pueblo, se confirmaron luego por el Consejo Electoral y se dio el aval para que el procedimiento continuara. Igualmente se nombró representante ante el Congreso para sostener la propuesta, avanzó el trámite parlamentario y se tienen los votos suficientes para terminar aprobándolo. Queda para más adelante el control de constitucionalidad ejercido por la Corte, que seguramente no tendrá problema, por cuanto se trata de una expresión del pueblo, que es el poder constituyente, con fuerza suficiente para purificar cualquier clase de vicios de carácter jurídico, incluyendo el cambio de texto para ajustarlo a las reales intenciones del pueblo. Por ése aspecto, pues, no tiene problema.
Pero las razones de orden ético sí rebasaron ya los límites, pues el caso de Yidis Medina y el senador Teodolindo Avendaño, deja un mal sabor, porque no es posible que se pruebe la existencia del delito de cohecho y que solamente resulten involucrados los que recibieron las prebendas y no los que las ofrecieron y las dieron. El derecho no es chueco, ni paticojo, y tampoco debe atentar contra la estética del mismo, por eso, cuando no se logra cuajar la armonía requerida, el cuadre de los hechos, la simetría que debe envolver cualquier hecho jurídico, se cae por su propia virtud. Ahora, las cuentas del referendo no casan tampoco, pues no se sabe de donde provinieron los fondos, si en realidad participó el señor David Murcia Guzmán, el prócer de las pirámides. Las operaciones no son claras y las cuentas se le han enredado el exsenador Giraldo, quien a su vez es famoso por el célebre caso del robo a Caldas. Son tantas las dudas que se le ven al referendo, que más parece una colcha de retazos a base de errores, incoherencias, de mal olor y mal sabor, que se viene cayendo por su propio peso. Desgraciadamente los senadores Alirio Villamizar y Efraim Cepeda, directores del partido conservador, se quedaron callados cuando los conservadores de la comisión terminaron votando a favor del referendo , desautorizando a la jerarquía del partido. Y analizando políticamente la situación, la coalición de gobierno pasa por una etapa de tentaciones, de resoluciones inconclusas o frustradas , como han sido el caso de German Vargas Lleras, quien tuvo que tascar el freno para evitar que su partido se le fuera de las manos, mientras él conspiraba a la luz del día contra la reelección, de Juan Manuel Santos, quien fue despojado a su vez de la natural presidencia del partido de la U , por orden expresa de palacio y ahora el de los conservadores, que estuvieron a punto de torpedear el referendo y que en cualquier momento se salen de la coalición. Se puede llegar al límite de las situaciones y todo lo sólido se desvanecerá en el aire, como decía Marshall Berman.