sábado, 24 de noviembre de 2018

EL ROBIN HOOD DE LOS RICOS


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
No hay duda que Humberto Martínez Neira se ha sacrificado en exceso por dar rienda suelta a su generosidad de abogado litigante y a su vocación mesiánica de defender causas que sean bien pagadas. Ese es su caso. Por eso se ha sometido  a situaciones apretadas, en que la sangre fría es la que se impone o de lo contrario todo naufraga y, pasa por momentos verdaderamente asfixiantes que solo la inteligencia y la habilidad son capaces de sortear.

El quiso por encima de todo defender a su cliente, el primer banquero del país, con base a honorarios seguramente muy bien tasados y de ahí que con gran astucia se inventó toda una estrategia de defensa que está llevando a cabo, con precisión y, desde luego, enfrentando cosas imprevistas, pero al final, todo le viene resultando.

 Como las cosas iban a ser difíciles para su patrón cuando hubiera pasado el tiempo de los negocios con Odebrech, se necesitaba que alguien estuviera al frente del cañón para sortear cualquier momento difícil y para eso nada mejor que hacerse elegir como Fiscal.

Por eso lo vimos tan atareado en esta faena, que cumplió a cabalidad con una fuerza que implicaba un hecho irreversible. Ya en el cargo, empezó a dominar la situación y le cargó el acento a quien se pusiera por delante, investigó y sacó conclusiones y dispuso el ajedrez para sus piezas maestras, siempre vigilante para que su patrón no resultara lesionado.

Su vigilia es constante y un desvelo por cualquier desliz, que los ha cometido, pero siempre tratando de enderezar las cosas. En primer lugar ha sido implacable en sus investigaciones y decisiones, mostrando una clara voluntad de acertar, pero siempre con el objetivo de fondo, que es salvar el pellejo de su representado, o de su poderdante.

Ha sido tal su celo, que ha deslumbrado a medio mundo, dando mazazos a diestra y siniestra, pero como siempre con el ojo fijo en su objetivo central. De ahí que su papel de investigador ha sido calificado hasta por sus enemigos de admirable por los resultados obtenidos hasta ahora.

Sin embargo, ya a estas alturas del partido le queda muy difícil no dejar al descubierto su papel de componedor, con metas precisas y que han despertado el olfato de todos los sectores, como aquella de  nombrar un fiscal ad-hoc, con el cual se quiere salvar algo de todo lo hecho por Néstor Humberto Martínez hasta ahora.

Pero la opinión pública de veras no ve esta medida como suficiente, cuando ya salta de bulto el quid de la trama y se hace imperiosa la salida del Fiscal, y que no nombren un ad-hoc, sino a un Fiscal con todas las de la ley.

viernes, 9 de noviembre de 2018

LA DEMOCRACIA LATINOAMERICANA


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Si algo le dice al mundo sobre el adelanto de la democracia latinoamericana es la actitud del poder judicial mostrado en varios países por recientes acontecimientos políticos. El poder judicial se ha encargado de poner un punto muy alto cuando diversas fuerzas políticas atropellaban y querían llevarse por delante el estado de derecho. Más no fue así, por la actitud de esos jueces y magistrados que sacaron la cara por la democracia en el continente.

 Dígalo sino el caso de Brasil, donde todo iba desbordándose al calor de la lucha que libró en ultimas Lula Da Silva, tanto para no dejarse capturar, como para insistir en su candidatura presidencial, que no tenía piso alguno de legalidad, así se alegara una legitimidad que le daba un pueblo mayoritario.

Pero salió el juez Moro y le puso el tate quieto al caudillo popular, quien tuvo que plegarse y resignarse a empezar su pena de prisión en la cárcel de Curitiba.  Restablecido el hilo conductor de la legalidad, Brasil votó en santa paz en sus elecciones presidenciales y llevó a la presidencia al capitán Bolsonaro.

Otro tanto sucedió en Perú, cuando el presidente Kuczysinsky sin ninguna clase de escrúpulos negoció con el fugimorismo su permanencia en el poder, concediéndole  el indulto al expresidente Fujimori, cuando se concentraba en hospitales para sacarle el cuerpo a la prisión. Y si el presidente Kuczysinky no tuvo escrúpulos un juez sí los tuvo y devolvió la historia hasta dejar sin piso el indulto y reducir a prisión a Fujimori nuevamente.

Y además, con llevarse a la cárcel a su hija la líder Keiko quien había adelantado  el desarrollo político para salvar a su padre de la cárcel. Los dos están ahora detenidos y el orden jurídico fue restablecido en Perú. Lo mismo ha sucedido  en Argentina, donde el poder judicial ha puesto los ojos en la expresidenta Cristina Fernández, quien ha sido tratada como un  ciudadano común y corriente, ante la expectativa de ella de sentirse más allá del bien y del mal por haber sido presidenta de Argentina. Y para cerrar el ciclo, en el Ecuador, Rafael Correa también ha tenido que enfrentar a un  poder judicial empoderado, que trata de aplicar la ley por encima de todo, no importa los títulos que tenga el infractor, quien se consideraba que tenía toda clase de licencias cuando ejercía el poder.

viernes, 2 de noviembre de 2018

LA FAMILIA QUE ME TOCÓ


POR: RAUL PACHECO BLANCO

Se queja Enrique Santos en su libro de memorias, del país que le tocó vivir, con cierta razón, pero sin tener en cuenta que lo más importante no es esto, sino  la familia en que le tocó nacer, pues ésta lo determinó, lo situó y lo proyectó. Sin esa familia no hubiera llegado a donde llegó. Y nos atreveríamos a decir que Alvaro Uribe sin la familia Santos tampoco habría llegado a donde ha llegado y sigue llegando, si nos atenemos a que Colombia ha sido un país tradicional, reverente con sus familias ancestrales, a las cuales ha llevado al poder sucesivamente.

 En este medio pertenecer a una familia como la Santos que viene desde la época de la Independencia, con Antonia, la prócer mayor de la dinastía, pasando por Eduardo el presidente de los años Veinte, que se disputó con Alfonso López la historia de Colombia durante un largo trayecto. Y que fundó el periódico más importante del país, que ponía presidentes y orientaba la opinión pública, hasta llegar a la presidencia de su hermano menor, que le duele en su primogenitura y, para colmo de males, pasar por la vicepresidencia de su primo Pacho, que según  la familia es un  tanto caído del sarzo, ya había de por si una predestinación.

Por eso se le facilitaron las cosas y se lanzó a fundar una revista de izquierda, Alternativa, con  soporte de la chequera del premio Nobel de literatura, Gabriel García Márquez.

Y después de quemar ese cartucho en donde le fue bien en el aspecto periodístico, pero mal en lo económico, no se fue a las barriadas a combatir con el pueblo y a aguantar hambre, sino su periódico lo recogió y lo mandó de corresponsal a Paris.

Le fue tan bien como al general Santander cuando Bolívar le cambio la pena de muerte por el destierro a Europa, donde se codeó con la nobleza europea y disfrutó de un asilo asistido.

Eso sí, se mantuvo fiel a su papel de periodista y nunca rompió las normas dictadas por su tío Eduardo para sus familiares que debían escoger entre el periodismo y la política, pero no mezclarlas.

Pero en esto tuvieron razón tanto Pacho Santos como su primo Juan Manuel, de no obedecer esas pautas y lanzarse a la política, cuando la sangre de Antonia los llamaba desde el siglo XIX.

 De ahí que la vida de Enrique Santos se confunde con la de la república misma, porque si bien es cierto se dedicó al periodismo, el estar cerca del poder, siempre, le dio la oportunidad no tanto de asistir, como de hacer y realizar acontecimientos que son privativos de los escogidos.

Por eso quedó su impronta en el proceso de paz, pues él fue prácticamente el iniciador de los diálogos con la guerrilla y factor decisivo en la implementación de los acuerdos con las Farc.

Y si su interés siempre estuvo de lado de la institucionalidad y de su clase, su corazón se ablandó con las Farc, a la cual se le concedió todo lo que pidió y que tiene al borde de la crisis el proceso por el rechazo que suscita entre el pueblo colombiano que padeció el escozor de las Farc.

Y en forma muy inteligente hace en su libro toda clase de críticas al proceso, sobre todo a su hermano menor, pero para terminar elogiándolo y salvándolo para la historia. En medio de todo fue fiel a sus propuestas. Le fue fiel al periodismo, porque nunca se salió de él; a su familia, porque si se ríe de su primo Pacho y critica a su hermano Juan Manuel, termina alabando a éste, y a las Farc, porque le dio vía libre al plan que ellas se forjaron y que maduró en las manos de Hugo Chávez, quien fue el verdadero propiciador del proceso para insertar a Colombia dentro del juego continental del socialismo del siglo XXI.

jueves, 25 de octubre de 2018

LA VUELTA AL PASADO


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Es tal la desorientación que sufren los partidos políticos en Colombia, que tienen  que acudir a cualquier clase de expediente para tratar de retomar el camino, para abrir una posibilidad hacia adelante ya que todo se halla entre brumas, sin que se logre acertar, porque el momento que vivimos es de transición, de paso de una época a otra, en al plano más revolucionario posible como es el cambio tecnológico.

Mientras tanto los partidos no piensan en una ideología porque todas están muertas: la comunista, la socialista, la fascista, todo aquello que antes significaba una lucha ideológica, ahora ya no tiene significación válida. En ese estado se encuentran los hermanos Galán, quienes se salieron del liberalismo ya que no se encontraban en él, no se hallaban cómodos para este nuevo periodo de la historia. Y lo mismo habían hecho los samperistas, quienes para eludir la férula de César Gaviria se salieron también del partido y optaban por hallar otra salida, quizá volver al pasado, pero con el pasado tampoco podían contar porque se encontraban con el proceso 8.000 y hasta ahí llegaba la cosa.  

Y siguen pues en la perplejidad, sin saber qué hacer, estudiando posibilidades, por ejemplo de un liderazgo nuevo como el de Cristo, que por lo menos tiene nombre y muchos símbolos. O insistir en Samper, tan desprestigiado como Unasur.

Esta solución, la salida del partido liberal ya la había tomado Vargas Lleras, quien fundó Cambio Radical precisamente porque el liberalismo ya no lo decía nada ni a él, ni al país. Y fracasó en su empeño de llegar a la presidencia, pero se está reinventando y buscando otra salida, presentando todos sus proyectos para su eventual presidencia para convertirlos en leyes y ahí ir sembrando semillas que algún día germinarán.  

Pero en el caso del Nuevo Liberalismo se trata de hacer algo imposible como es resucitar a Luis Carlos Galán ante la falta de símbolos nuevos. Eso ya no cuaja. Porque todo obedece simplemente al periodo de transición que vivimos y que en medio de semejante atortole, se mira de pronto al pasado, para llegar a la conclusión de que la cosa no es por ahí.

Los partidos tienen que construir nuevas utopías, fabricar discursos a tono con la nueva época, enfrentar una nueva especie, la conquista del espacio, el desarrollo de la informática y la biotecnología.

 Esa idea tan rentable para el liberalismo que consistió en presentar como algoritmo del país la división de dos países, uno progresista, el liberal y otro retrógado, el conservador, se acabó, ya rindió todos sus frutos.

viernes, 19 de octubre de 2018

HARARI Y SUS LECCIONES PARA EL SIGLO XXI

POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Yubal Noah Harari no cree que estemos al borde un choque de civilizaciones al  darnos cuenta del accionar continuo de la cultura musulmana que se manifiesta en muchos frentes y que lo pone a uno a imaginar una guerra contra el cristianismo. Y de repente cierra esa posibilidad al sentenciar que en la actualidad no hay sino una sola civilización que se encuentra vigente en el siglo XXI por acción de la globalización ha producido el fenómeno. No hay que asustarse pues, con el cuento de Hungtihton y su choque de civilizaciones.

Recuerdo que Ortega y Gasset hablaba mucho de la altura de los tiempos. Y eso es lo que hace Harari, ponernos a la altura de un siglo XXI que es la conjunción de un cambio sostenido que no para y al cual debemos acomodarnos.

Pasa revista a las religiones para sacar algunas conclusiones: en primer lugar, según él, no se sabe qué sea peor, si el politeísmo o la creencia en único Dios como lo cree el cristianismo, el judaísmo y el islamismo, un  Dios único que queda nadando entre millones de siglos, si nos atenemos a que el universo fue creado alrededor de 13.800 años, la tierra de 4.500 millones y el hombre alrededor de 2.000 millones. La biblia y el Corán son relatos humanos, sin ninguna prueba de que hayan sido promulgados por los dioses, agregando además, que para la ética que necesita una nación no hace falta un  Dios porque la simple unión entre humanos es suficiente para garantizar el orden.

Y él, como israelí, o como judío se adelanta a criticar tanto a su raza como a su religión, agregando que el aporte de su patria a la historia del mundo no ha sido mayor y solo ha habido individualidades como el caso de Einsten y Freud que han aportado mucho a la cultura universal.

Ahora, además de prepararnos para la globalización y para la única civilización vigente, no debemos darle tanta importancia como se le ha dado al terrorismo, porque al sacar conclusiones y al hacer comparaciones, las victimas del terrorismo han sido mínima en comparación con la bajas en dos guerras mundiales y guerras aledañas.

 Para meterse también con los retos de la tecnología, al borde ya de la existencia del homo sapiens para constituir una nueva especie, ya más adelantada, en donde la infotecnología y la biotecnología darán una vuelta de tuerca a las cosas, como por ejemplo la sustitución del hombre en materia de trabajo por los robots que harán toda clase de oficios, desplazando el rol tradicional del hombre.

Y además, cuestionando conceptos como el de la libertad, e ideologías como la liberal que se sostiene en base a un libre albedrio cuando este no existe, pues las células de que está compuesto el hombre le pautan su quehacer y el algoritmo correspondiente entra a desarrollar una lectura ya definida.

ENTRE LA GLOBALIZACION Y LA TENDENCIA


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 

El análisis político se ha dejado dominar por dos referentes que parecen permear cualquier comentario de nuestros periodistas y escritores: la globalización y la tendencia. Fueran de ellos no hay salvación. Así se viene interpretando la última historia con la elección de Trump en los Estados Unidos y el Brexit de los británicos como la irrupción de le extrema derecha en la política mundial, como consecuencia, a media distancia, de la desaparición del comunismo y, en última instancia, del empoderamiento del liberalismo y caída por efecto del neoliberalismo.  Se toma pues, como apoyo el resurgimiento del fascismo, que en el fondo es la política del nacionalismo que produjo la segunda guerra mundial y que vino a convertir el mundo en un apetitoso pastel para la bomba atómica. Y a renglón seguido se marca con el sello de la tendencia para hacernos creer que esto estaba pautado previamente por la historia y no había salida posible fuera de ella. Es el efecto de la tendencia y fuera de ella no hay salvación.

Pero va uno a analizar cada caso y le encuentra la explicación sin meterse en honduras, con la sola observación de la realidad, de la modesta realidad de todos los días.

Entonces, cuando se le da el significado de irrupción del fascismo en cabeza de Trump, quien desde luego se tragó una versión de los libros películas y noticiarios sobre el Duce, para tratar de imitarlo hasta en los gestos más mínimos. Esa brusca caída de las cejas, esa apretada del mentón como símbolo de fortaleza, esa mirada agresiva que tanto molestaba a los aliados en la segunda guerra mundial, se la aprendió de memoria ante el espejo el señor Trump, mientras a su lado cuidaba  su belleza su esposa Melania, que es la antítesis bella del monstruo o aprendiz de monstruo. Sin tener en cuenta que la candidatura de la señora Clynton era vista como el símbolo de la politiquería, de la corrupción y luego el desgaste de dos periodos demócratas en cabeza de Obama.

Y en Inglaterra se hace lo mismo en materia de interpretación para hacer ver que el mundo está en una etapa de regresión, mirando en el pasado alguna orientación que lo alivie. Allí el análisis novísimo, globalizador y de tendencia, el brexit no se produjo por causas locales, sino globales, cuando en esto hay mucho del alma inglesa, con su insularidad geográfica que ha perfilado su política internacional y que lo hace creer más en un  destino nacional que en uno globalizado. Hasta Arari nos solucionó el problema que nos planteó hace rato Hungtinton con el choque de las civilizaciones, al señalar en su último libro 21 lecciones para el siglo XXI, sentando la tesis de que ya no hay una pluralidad de civilizaciones, sino solo una, como efecto de la globalización. Y cita como ejemplo las agresiones violentas del estado islámico a predios occidentales, en donde no se deja títere con cabeza y todo cae bajo la destrucción, a excepción de los dólares que si son rescatados y mantienen su precio en el mercado.

De la misma manera se trata también el caso de Bolsonaro en Brasil, sin  tener en cuenta las causa locales de la política cuando la era de Lula llegó a su ultima instancia envuelto en nubes de corrupción y por lo tanto ganándose el rechazo del pueblo brasileño raso. Y como si fuera poco, la puñalada que le propinaron al candidato, lo magnificaron ante la opinión y lo victimizaron.

Ahora hay que tener en cuenta que en Francia fue elegido Macron, un  político de centro, cuando se insinuaba el triunfo de la extrema derecha de la Le Pen. Y lo mismo sucedió en Colombia, con un candidato de centro como Ivan Duque, que si bien fue el candidato de Uribe fue elegido con los votos de una mayoría de centro.

jueves, 4 de octubre de 2018

EL REINO DE LA INCOMODIDAD

EL REINO DE LA INCOMODIDAD

POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
A Álvaro Uribe realmente le ha tocado muy duro para abrirse campo en la política y por eso tuvo que echar mano de los consanguíneos Pacho y Juan Manuel Santos, porque eso significaba nada más y nada menos, que la cúpula de la oligarquía bogotana y, además, el poder político de hacer candidatos a la presidencia como lo era en su momento El Tiempo. Pero esta es historia vieja. Ahora la nueva, es que Uribe no sabe qué hacer con Pacho Santos. Porque si bien se arriesgó para llevarlo a la vicepresidencia, por lo menos valía la pena cuando estaba valorizado por las acciones de El Tiempo.

Pero ahora, ¿qué hacer con él? .Al presidente Duque se le ocurrió mandarlo a Washington en una época en que no se iría a notar tanto la llegada del nuevo embajador, pues estaba de por medio Donald Trump, casi un  fenómeno parecido al de Pacho Santos, pero más grave.

Y después de tomarse la foto oficial con el presidente norteamericano, dio unas declaraciones apenas lógicas dentro de su concepción de la política, en el sentido de que la vía militar para definir el problema venezolano no se podía descartar, pues si llegaba a los oídos ligeros de Trump no se escandalizaría por semejante bobada, pero sí ponía en peligro el territorio colombiano  que podía ser iluminado  por la presencia de aviones de combate venezolanos y con la toma y destrucción de Cúcuta.

 Afortunadamente salieron al quite, el mismo presidente quien dijo que en ninguna manera apoyaría soluciones de fuerza contra Venezuela y, en iguales condiciones, su canciller, quien repetía hasta el cansancio que Colombia no estaba de acuerdo con soluciones militares.

Y sudaba la gota gorda el canciller tratando de contestarle a Andrés Openhaimer desde CNN, quien insistía en que el nuevo embajador de Colombia en Washington lo había dicho con todas las letras, hasta casi se quita las gafas de la incomodidad de la pregunta y la insistencia en el reportero de cogerlo fuera de base.

Así que Pacho Santos los puso en aprietos desde el primer día y de aquí adelante los pronósticos son reservados. Pero viéndolo bien, el presidente Duque lo hizo bien porque si no lo nombraba corría el peligro de que la prensa dijera que el expresidente Uribe se sentía traicionado por el presidente nuevo, en vista de no tener en cuenta a Pacho Santos para una misión especial, que si bien es cierto se trataba de material inflamable, era de su entraña. En todo caso se tiene como algo positivo el hecho de que el embajador no domine el inglés y estemos, por lo tanto, lejos de  falsas traducciones de sus palabras.

Por lo menos eso es un plus a la hora de apagar incendios.

LA VENGANZA DE LA GEOGRAFIA

POR: RAUL PACHECO BLANCO

 Interesante la obra del periodista norteamericano Robert Kaplan sobre el determinismo geográfico. La tesis parte de que la posición geográfica que ocupa un determinado país, su tamaño, su composición, sus salidas al mar, llevan a una respuesta condicionada y por lo tanto,  su manera de pensar y de reaccionar en materia política está dada por la geografía. El caso de Rusia por ejemplo, que siendo el mayor país del mundo por su extensión, sin embargo se cree muy vulnerable por el hecho de no tener costas que lo protejan de asaltos y en cambio tiene la cercanía de países continentales que si son un peligro para su seguridad . Otros países como Estados Unidos gozan precisamente de tener acceso a los dos principales océanos del mundo y por lo tanto, le dan una vocación de mar para convertirse en una potencia marítima. Es el caso también de Inglaterra. De Rusia siempre habíamos manejado el criterio de su vasto territorio, inhóspito para crear un tipo de ciudadano conflictivo, derivábamos de ahí también la crueldad que de otra parte le venía por el lado asiático. Ahora para Kaplan lo determinante es la geografía. Entre otra cosas, le sirve también para esbozar una política con relación a México, partiendo de la creación de  una gran potencia junto con los Estados  Unidos como eje y, Canadá, cosa que estamos viendo ahora con la confección del libre tratado de comercio suscrito por Trump y los presidentes de México y Canadá. Y plantea esta política en contra de la posición tradicional de Estados Unidos de intervenir en casos muy aislados, como el de Irak y Afganistán, en donde se vieron abocados a mantener un conflicto que no les atañe lo suficiente para el precio que están pagando. En cambio por los lados de México, quien contempla una situación de crisis, con el narcoterrorismo a bordo que le crea tantos problemas que lo ponen al borde de considerarlo casi como un país fallido. El libro pues, si bien se trata de un periodista independiente, lo escribe con la camiseta puesta en su condición de norteamericano, preocupado por el desgaste y la pérdida de liderazgo dentro de la política mundial, para buscarle otras salidas que le permitan esperar con más tranquilidad. Inclusive para la ideología de un país según el autor viene de su situación geográfica. De ahí que un país como Estados Unidos, dada su conformación geográfica, estaba destinado para mantener un orden democrático, pues su territorio da para descentralizar el país y no centralizar el poder para luchar contra una geografía adversa, como es el caso de Rusia.

sábado, 22 de septiembre de 2018

LOS SALTAMONTES



POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
El saltamontes es un insecto de cuerpo alargado, generalmente verde o marrón, con ojos prominentes, como los del ministro Carrasquilla o los del fiscal Néstor Humberto Martínez.  Además, tiene antenas finas, seis patas las posteriores muy largas y robustas, con las que da grandes saltos,( generalmente de la empresa privada al estado y del estado a la empresa privada) y alas protegidas por unas placas duras  denominadas élitros: hay numerosas especies, todas herbívoras. Cuando anidan en la empresa privada, se contagian de las leyes del mercado y establecen pautas para poner en práctica luego. Se trazan objetivos a mediano y largo plazo para enriquecerse, y para ello  emplean todos sus talentos a fin  de que no se quede nada sin  señalarle objetivos: que puede ser un plan para endeudar a los municipios con el señuelo del agua potable para la comunidad, pero con préstamos que arden de usura, pero que bien vale la pena pues es para beneficio de la comunidad, no propiamente la LGTB, sino toda. Dentro de la dinámica del mercado no se les queda pieza por definir, ni determinar ni ponerle dirección y sentido, porque todo está  enderezado a producir, a como dé, contrariando las leyes de la moral, que es una antigualla medioeval ya sin sentido y de la ética, que es otra antigualla liberal que se inventó para sustituir  la moral y enterrarla definitivamente. 

Teniendo pues la vía libre dentro de este terreno de le eticidad, solamente queda el estrecho de la ley, que hay que saber paliar, con  ansias de novillero pero con temple de torero para saber moverse dentro de un espacio que ya no transmite energía sino puro negocio; y sacarle el cuerpo a tanta ley que parlamentarios desocupados se pusieron a hacer para justificar sus costosas dietas, pero siempre pensando en los huecos que va dejando el derecho, para que por allí se cuele la tinterillada que pone las cosas en sus sitio y permite el paso por las amplias avenidas de que hablaba el expresidente Turbay Ayala, en la difícil conversión de la corrupción a sus justas proporciones. Y cuando entran al gobierno ya saben cómo hacer sus cosas, cuando los espera el negocio redondo y todo enmarcado dentro de la ley, sin un solo rasguño al pasar las alambradas de la ley.

El ministro Carrasquilla y el fiscal  son los dos ejemplos se esos saltamontes que ora moran en la empresa privada y luego se van al gobierno, tejen el camino por donde va a pasar el negocio y luego vuelven a la empresa privada, como si tal, para lograr los dividendos que los dejen satisfechos. Y todo, dentro del ámbito del derecho. Para qué la moral y para qué la ética.

NO HAY PEOR CUÑA QUE LA DEL MISMO PALO



POR: RAUL PACHECO BLANCO

 

Tenemos dos ejemplos: el de Pacho Santos y el de la izquierda colombiana.

En el caso de Pacho Santos lo peor que le ha sucedido hasta ahora es el fuego cruzado de su propia familia, que lo ha zarandeado en la forma que ha querido, tratando de rebajar su imagen ante la opinión pública.

Que se cayó del zarzo dice Juan Manuel Santos, en su célebre papel de comediante. Y luego su sobrino Martin le endilga que tiene un tío marihuanero, precisamente cuando se estaba preparando para viajar a Washington para posesionarse de la embajada.

Y no le perdona a Pacho Santos el que se hubiera convertido en seguidor impecable de Alvaro Uribe, aun a costa del papel que debe desempeñar su apellido en la historia de Colombia, cuando Juan Manuel se fue al otro lado tratando de encontrar el hilo perdido de Eduardo Santos, su entronque más fresco con la historia.

A Pacho Santos no le perdonan que hubiera sido vicepresidente y que ahora se apreste a  llegar a la embajada de más rango internacional como lo es la embajada en Washington. Hacen mofa de esos logros.

Él no se siente herido y deja pasar las ofensas como un acto del servicio.

Y el caso de la izquierda, que le garantiza a la derecha estar tranquil, por un  largo rato, dado que Gustavo Petro y Jorge Enrique Robledo no se pueden ver ni en pintura. Dígalo no más el caso de la jefatura de la oposición que según los resultados de las últimas elecciones presidenciales eligieron por ocho millones a Petro como jefe de la oposición. Pero esto no es reconocido por Robledo quien desde el primer momento se dio tentado a  acudir a toda clase de argumentos, con la casuística escolástica en mano, para tratar de enervar un posible efecto del electorado en la denominación de jefe de la oposición, en que el parece haberse estacionado.

La oposición  no pudo ponerse de acuerdo en ese saque inicial y por lo tanto hará una oposición dividida entre los distintos sectores.

De tal manera que la derecha y el gobierno tienen asegurado su futuro pues la pelea interna es más brava que la externa. ¿Quién se imagina a Petro cediéndole el paso a Robledo?. O al contrario, ¿Robledo cediéndole el paso a Petro? Como lo dijimos al principio, no hay peor cuña que la del mismo palo.

sábado, 8 de septiembre de 2018

EL CASO LULA


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
¿Cuándo se presenta un enfrentamiento entre la legitimidad y la legalidad, cual  prima?. La legitimidad es un  valor democrático y la legalidad un valor liberal.

Presentar las cosas así, en el plano abstracto sería muy difícil escoger entre una y otra y se necesitaría meternos ya en el terreno de lo real para analizar un caso específico y ahí si sacar conclusiones.

Porque en teoría, para un demócrata imperaría la legitimidad, pero para un  liberal imperaría la legalidad. Ese dilema puede contemplarse en el caso de Lula Da Silva.

Para un lulista el máximo valor lo da la soberanía del pueblo y si el pueblo quiere que se reelija a Lula, pues lo lógico es que se haga. La ley es lo de menos pues lo que cuenta es el respaldo del pueblo. Pero si ese candidato está sub judice y no solamente está sindicado sino condenado, con juicio ya proferido, ¿cómo se comporta esa legitimidad que se alega para hacer nugatoria la condena de Lula y por el contrario, respetándole el derecho a elegir y ser elegido, se le reelige?.

En primer lugar esta hipótesis no se da en el espacio-tiempo histórico que estamos viviendo, pues la condena se produjo antes que la elección y por lo tanto precede esta condición. Es decir, físicamente es imposible, pues primero se cometió el delito, se investigó y se condenó. Los dos tiempos no coinciden, el del juzgamiento y el de la elección.

Habría que retrasar el tiempo para que las cosas se acomodaran y la legitimidad entrara en el mismo espacio-tiempo que la legitimidad para que obrara con todos sus efectos.

Al no darse esta secuencia es totalmente imposible que el conflicto legitimidad-legalidad se configure. Y aun en gracia de discusión si se aceptara que los dos conceptos concurren al mismo nivel, tampoco sería procedente que primara la legitimidad,¿ pues en qué queda el orden establecido, llevado a una constitución, institucionalizado en unos códigos y sin embargo en un momento dado, por argumentos estrictamente políticos se llevaran de calle todo el estado de derecho?

Y de otra parte, también volveríamos años atrás en la historia de las ideas y de los principios, al aceptar de paso la soberanía absoluta del poder, que desde 1.789 fue quebrada y llevada a la guillotina en el cuello de los reyes. El concepto de democracia implosionaría, se destruiría a sí mismo.

Porque ¿de qué vale toda una institucionalidad soportada sobre normas si en un momento dado se hace a un lado y queda vigente únicamente los derechos de una sola persona? 

LA ERA PEKERMAN


 POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
De la era Pekerman queda la  clasificación de Colombia a dos campeonatos mundiales de fútbol, el sentido de equipo, la disciplina observada por los jugadores, la confianza en su técnico. Durante toda esta temporada siempre hubo armonía entre el plantel técnico y los jugadores. No hubo manifestaciones de desorden, de falta de coordinación y antipatías entre unos y otros, sino todo lo contrario, un gran sentido de equipo y un gran respeto por el cuerpo técnico. Sobre este aspecto no hay nada más que anotar y no se debe criticar sino alabar todo lo que se ha hecho a este respecto. Quizá en el plano psicológico el técnico supo inyectar a sus jugadores la confianza en sí mismos, la posibilidad del triunfo y todo aquello que sirve para motivar a un  plantel, y ponerlo en las mejores condiciones para la competencia.

Ahora, en la parte futbolística si bien es cierto figuraba como un  equipo acoplado, sin embargo nunca buscó su propia propuesta de juego, su estilo. Siempre dejó en manos de los contrarios el que impusieran su patrón de juego, acomodándose a la propuesta del contrario. En este aspecto faltó un  poco de imaginación, de iniciativa, de audacia para buscar un estilo propio que lo identificara ante los extraños.

Por ejemplo, el técnico Sampaoli  logró imprimir un estilo de juego tan dinámico a la selección de Chile, que la transformó y la llevó al más alto rendimiento. Era una propuesta a base de pasos largos, rasante y remates desde todos los ángulos.

Luego, es cierto, que ese mismo técnico fracasó con la selección argentina, le pudo el peso de sus compatriotas y las cosas cambiaron. Pero lo cierto es que Sampaoli  le imprimió un estilo al seleccionado chileno que lo hizo grande.

El equipo colombiano en cambio, jugaba basado  en la iniciativa de sus jugadores, sin un libreto previo, siempre enderezado a contrarrestar el juego del adversario, pero sin proponer un juego ofensivo o defensivo.

Siempre el equipo dependió de la capacidad para ordenar el juego de James Rodríguez y de la capacidad goleadora de Falcao García. Esa era la estructura del equipo y de ahí no se movió.

 Por eso hace falta un entrenador que dado el auge del futbol europeo, enderece por ahí su libreto, en el concepto que bajo mi punto de vista es una síntesis del fútbol latinoamericano y el europeo.

Los equipos europeos siempre basaban su fortaleza en la parte física y corrían como unos desesperados, todos al ataque, casi sin concierto alguno. Y los lainoamericanos, en cambio, controlaban el balón, lo paseaban por toda la cancha y cuando se presentara la oportunidad pateaban al gol.

Ahora los europeos incorporaron la técnica del control del balón, pero le añadieron la capacidad ofensiva. Y les dio resultado, pues se llevaron la última copa.

Pero lo que  hay que admirar más en el profesor Pekerman es la identificación sentimental con el equipo, en cuerpo y alma.

 Había que verlo en los partidos por televisión, estremecerse cuando se jugaba en contra de su equipo, su nerviosismo ante un penal, que prefería no mirarlo patear. En fin, una total entrega, que se manifiesta además, en el desgaste físico que sufrió y se le nota por encima el cansancio y la responsabilidad que mantuvo, pues el hombre termino acabado. Eso de que el argentino es sobrado para todo y nada lo inmuta, no es cierto. Perdón, en éste caso.

Por eso merece el agradecimiento no solamente de la hinchada sino de los colombianos todos por la dignidad con que siempre llevó su cargo. Y se fue dolido con los medios de comunicación por el trato que recibió: para ponerlo en términos bogotanos, en la forma más vergaja posible.

sábado, 1 de septiembre de 2018

LA AVIVATADA.


 
POR: RAUL PACHECO BLANCO.

Ya los sociólogos se han encargado de analizar uno de los rasgos más característicos de los colombianos, como es la avivatada. El que aprovecha de una circunstancia para sacarle el mejor jugo posible. Eso fue lo que hicieron Claudia López y la futura primera dama con la consulta contra la corrupción.

Allí se llevaban todas las de ganar, pues quien que esté lúcido se va a negar estar contra la corrupción? La cosa se cae de su peso.

Y, lo peor de todo, es que después de que pierden la consulta se presentan a la televisión como las vencedoras y, todavía más, los canales de televisión se prestan para la farsa, para decir mentiras.

 Porque tal como quedaron las cosas, el Congreso no está obligado darle trámite legislativo a las preguntas que se hicieron en la consulta, pues no llegó a la suma exigida por la ley para consolidarse como opción legislativa. Y los diarios también hicieron eco de la misma transmisión de una noticia que no es verdad.

Tanto que se ha escrito y dicho sobre la posverdad. Y aquí está un caso mondo y lirondo.

Pero ya entrados en gastos se podría aprovechar la ocasión, como lo ha hecho el presidente Duque, para hacer un gran acuerdo nacional alrededor de una propuesta parlamentaria firmada por todos los partidos. Pues algo hay que salvar de los trescientos mil millones de pesos que costó la consulta y derivar de ahí algo positivo para Colombia.

Pero no porque la ley exija que pasada la consulta y con los resultados obtenidos quede el legislativo obligado a transcribir las preguntas de la consulta para que sean aprobadas.

Alrededor de este tema se puede hacer el gran debate nacional para sacar unas conclusiones que salgan de todos los partidos políticos, porque creemos que todos están interesados en sacar adelante normas que atajen la corrupción, pero no con la avivata perspectiva de los organizadores de la consulta para dividir en malos y buenos a los colombianos y tratar de sacar ventajas ante la opinión pública.

Este podría ser el gran propósito nacional, o el acuerdo sobre lo fundamental de que hablaba Alvaro Gómez y que repetía en la campaña Petro.

Con las propuestas de todos los partidos empezaría el gran debate nacional para obtener la fórmula adecuada y consensuada porque todos estamos de acuerdo en que las cosas no pueden seguir como hasta ahora, cuando todo es comprable y las empresas multinacionales hacen lo suyo para hacerse a los servicios de funcionario públicos.

Y esto contando ya con el conteo definitivo en donde la consulta no llegó a los doce millones y se quedó  en once millones seiscientos mil votos.

sábado, 25 de agosto de 2018

¿Y QUIEN ES EL PRESIDENTE DUQUE?


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Para Abdón Espinosa, Duque es el nuevo Enrique Olaya Herrera que va inaugurar una época de renacimiento del liberalismo, luego de la breve pausa del Republicanismo de Carlos E Restrepo y de años de dominio del conservatismo cuando se cuajó la historia de la regeneración.

Para otros Duque es un economista, un técnico metido a político, de espíritu corporativo y con el concepto del crecimiento económico como patrón del cambio. Por eso, según ellos, le dejó el manejo de la política a Alvaro Uribe, mientras él se dedica a gobernar en términos economicistas, con su gabinete de figuras jóvenes y desprevenidas políticamente.  

Para otros, Duque puso en práctica el sistema parlamentario de facto, al instituir a Alvaro Uribe de Primer Ministro, el dueño del balón político, para él constituirse en solo jefe de estado.

Para otros, Duque es el nuevo Macron francés  que representa la línea del centro, sin experiencia en los tejemanejes electorales. Por eso, él se metió de lleno en el Centro Democrático, mas atraído por el nombre que por el centrismo de sus militantes, quienes se caracterizan por sus posturas extremas y  más en línea con la extrema derecha europea.

Todas estas interpretaciones tienen algo de veracidad y solo el tiempo nos ira diciendo en realidad cual es el verdadero talante de Duque, que hay que reconocerle su olfato para arrimarse a los agujeros negros por donde va a pasar el tiempo que se abre camino.

Pero en todo caso, ha sido una persona preparada para ejercer el gobierno, con mucho estudio al fondo, donde ha producido varios libros que se relacionan con la teoría naranja para sacarle jugo a la cultura y convertirla en herramienta de crecimiento y no solamente de especulación.

Ya en las librerías se aprecian las obras del joven gobernante, que primero teorizó y se metió de lleno en el estudio de los problemas nacionales, en lugar de irse a los pueblos a recoger votos y aprender todo lo referente al manzanillismo para luego empezar una carrera política que lo llevara del concejo a la asamblea, luego a la Cámara y por ultimo al senado.

Y tuvo el olfato también de escoger un  padrino, que sin  él no hay paraíso en nuestra política, que ha dejado regado en la historia mucho proyecto interesante de figuras que se extinguieron sin coronar la meta, por la falta de una padrino adecuado que les permitiera llegar. Desde la generación  de Gaitan y Turbay se aprendió la lección de que sin un padrino eficiente y oportuno no es posible llegar a la presidencia. Los casos de Turbay y Gaitán sentaron jurisprudencia en ese aspecto.

sábado, 18 de agosto de 2018

JUAN MANUEL SANTOS

POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Se trata de una personalidad supremamente compleja, competitivo, vanidoso, consciente de su papel dinástico, aún en los peores momentos,  con una confianza en sí mismo que lo  hace salir adelante y sacar la cabeza por donde la ha metido.

No es el político tradicional, con mucho verbo y pocas ideas. Tiene principios, pero muy escogidos: por ejemplo, la libertad y la democracia, Los demás, que entre el diablo y escoja: cuando dijo en una célebre ocasión que su nuevo mejor amigo era Hugo Chávez, ya se sabía que ese mensaje estaba envenenado y decía uno para  sus adentros: ¡En la que se metió Hugo Chávez! 

Y tal cual, lo aprovechó para hacer el proceso de paz, que sin él no hubiera prosperado, porque la voluntad de las Farc para su sometimiento siempre estuvo atada a Chávez y si él no lo facilita no se consigue, para luego entrar en la fase de la traición y salir de él, como había salido de Alvaro Uribe, a quien ayudó es cierto a que fuera presidente. Porque sin el apoyo de la casa Santos y del periódico El Tiempo, el paso de Uribe hacia la casa de Bolívar no hubiera sido fácil sin el aporte de la dinastía Santos.

Cuando llegó a la Presidencia no solo contempló la traición a Uribe, sino la superación de su mandato y de su legado histórico. Si Uribe se había ganado la simpatía de muchos colombianos por su carácter y su lucha sin contemplaciones con la guerrilla, él tenía que superarlo, pero en otra forma: en este caso, buscando la paz, tan esquiva, que fue la ilusión de muchos gobiernos como el de Barco, Betancur, Samper, Pastrana y ninguno lo consiguió.

Su papel dentro de la historia del país, por lo tanto, estaba inscrito dentro de ese ámbito, el ámbito de la paz.

Si ayer lo que jerarquizaba a un presidente era la reforma de la constitución, ahora lo jerarquiza la conquista de la paz y a eso dedicó, sin contemplaciones. Todo lo sacrificó en aras de ese empeño, que por cierto le daba una gabela más: el premio Nobel de la paz.  

Conseguído esto, lo demás le importa un pepino. Y está convencido que mientras más tiempo pase, el prestigio derivado, pero con retraso, de la paz con las Farc, revertirá con el tiempo y le hará justicia.

Una justicia que es relativa, pues si bien las Farc entregaron las armas y se reincorporaron a la legalidad fue a un precio excesivo que él pago con creces. La violencia sigue y la falta de estado en los territorios dominados por gente armada continúa. Y por último traicionó a Israel.

jueves, 9 de agosto de 2018

LA CRISIS DE LOS PARTIDOS EN COLOMBIA




POR: RAUL PACHECO BLANCO

 

Desde que se fundaron los partidos en 1848 y 1849 tanto el partido liberal como el conservador han pasado por crisis de las cuales han salido ilesos pero  ahora,  ya en los años 2000 del nuevo siglo no sabemos si será la declinación definitiva o simplemente la crisis coyuntural tradicional.

La primera crisis se dio cuando se produjo la unión entre los independientes liberales encabezados por Rafael Núñez y el conservatismo nacionalista encabezado por Miguel Antonio Caro. De ahí surgió el partido nacional, que creó tanto la constitución del 86 como los sucesos que envolvieron tal periodo. Y no obstante la importancia de estos eventos, el partido nacional no cambió la historia de los partidos, quienes siguieron existiendo.

Luego apareció  Carlos E. Restrepo y el republicanismo, en donde conservadores como Restrepo se unieron con liberales como Enrique Olaya Herrera  y crearon el republicanismo. Entonces también se tuvo la sensación de que los partidos se iban al traste.

 Pero La Iglesia se encargó de revivir al partido conservador y es así como viene a imponer sucesivos gobiernos durante los periodos de Suárez, Concha, Pedro Nel Ospina y Abadía Méndez. Es decir, que de la crisis salió fortalecido el partido conservador y prolongó su dominio hasta los años treinta en que se abre otro ciclo inaugurado por Olaya Herrera y enriquecido por Alfonso López, en que el partido liberal vuelve a la carga y empieza una hegemonía que va a durar dieciséis  años. No nos detenemos a particularizar la época, porque lo interesante es el fluido de los partidos que a pesar de sus crisis, reviven.

Pero si el partido se divide y se cae del poder da opción al partido conservador para que se adueñe del mando durante un corto tiempo y prende las expectativas en él que sueña con traer el experimento de España con su falangismo, para acomodarlo a nuestra constitución.

 Sin embargo, a poco andar los partidos entran en crisis y aparece el general Gustavo Rojas Pinilla, quien le da aliento a la Anapo, el partido que nació del binomio pueblo-fuerzas armadas.

 Y otra vez vino a verse el desgaste de los partidos y la fuerza nueva que entrañaba el gobierno militar, que entre otras cosas, estaba a tono con la coyuntura regional, porque en Latinoamérica se imponía el auge de las dictaduras militares.

Sin embargo, cualquier sospecha de permanencia se desvanece: los partidos ayer derrotados, se unen y acaban con la ilusión de la Anapo, que se ve reflejada luego en la hija del dictador y la cosa no pasa de ahí y menos, siguiendo el tiempo, los hijos de la hija del dictador acaban con lo poco que quedaba y se fueron a la cárcel.

Los partidos recobran su vigencia, establecen un orden cerrado para ellos y sacan del juego cualquier evento que los perjudique y no les permita seguir gozando del poder.

Y viene luego toda una seguidilla de gobiernos conjuntos con la alternación y para más adelante dar los primeros pasos del despegue: López Michelsen, Julio César Turbay, Virgilio Barco.

En esta ocasión le fue mejor al partido liberal, pues logró la presidencia en periodos consecutivos. Pero cuando menos se pensaba y luego de sucesivos gobiernos de Gaviria, Samper, Pastrana, llega el nuevo Núñez  o el nuevo Restrepo o el nuevo General y acaba de una vez con los partidos, que le tienen que pedir permiso para unirse a él en torno a Iván Duque.

Estamos en la era del Centro Democrático, como ayer estábamos con el partido nacional, el republicano y el anapismo.

Lo cual quiere decir que las nuevas propuestas de partido vienen envueltas en situaciones particulares, bien sea a través de ideas o de caudillos. Si es de caudillos, las horas podrían estar contadas y seguramente llegaríamos al mismo llanito que en las otras épocas que acabamos de mencionar.

 Ayer fueron Núñez y Caro, Carlos E .Restrepo, el general Rojas Pinilla y ahora Alvaro Uribe. Esta última alternativa viene realizándose y no sabemos en dónde irá a desembocar. Si obedece a las crisis coyunturales que hemos planteado, bien sabemos que de allí no pasará.

Desaparecido de la escena política el expresidente Uribe, volverán las aguas al mismo nivel y recobrará el tono partidista que siempre  ha tenido.

O puede suceder lo de Argentina, en donde el peronismo no fue un suceso coyuntural, sino se volvió  estructural. La mayoría de los argentinos de ayer, hoy y mañana, serán peronistas. Y otro  tanto iba ocurriendo en el Perú, con al aprismo. Pero pare de contar. Claro está que entramos en una época de cambio acelerado, en que  la ciencia nos tiene reservadas muchas sorpresas. Por ejemplo, la informática puede acabar con los partidos, pues los ritos que hoy se surten como las elecciones se podrán realizar a través de internet y entrarían a sobrar los intermediarios, como lo son los partidos con relación a la opinión pública.

jueves, 26 de julio de 2018

CUBA EMPIEZA A DEVOLVERSE


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 Con la nueva constitución Cuba trata de acomodarse a los nuevos tiempos y empieza a devolverse en su currículo marxista trazado. Del comunismo a donde llegó, en donde se desmanteló  la propiedad privada y todo pasó a manos del estado en tránsito hacia una sociedad de propietarios, ahora se devuelve hacia el socialismo propiamente dicho, es decir, a que sólo queda en manos del estado los medios de producción y tanto el comercio, como la agricultura y los servicios, son susceptibles de pasar al sector privado.

Esta es la esencia de lo que está ocurriendo y que espera luego llevar al pueblo para su ratificación. Por lo demás, el tiempo lo dirá en la medida en que los cubanos se vayan acostumbrando a los métodos capitalistas o burgueses que les llegan desde Miami y todos los rincones del mundo, a donde han ido a parar multitud de cubanos sacados de la isla para dejar en manos de los Castro el juego de la oferta y la demanda.

Entre las cuestiones a plantear está el caso de la presidencia, cuando allí se creó un consejo de estado, para que quien lo presidiera fuera prácticamente el dueño del poder, en una copia a escala  del modelo ruso.

 Ahora el presidente de Cuba saldrá de una especie de régimen parlamentario, lo cual indica que será elegido por los miembros de la Asamblea, con un primer ministro que no sabemos si será escogido por el mismo presidente o por la asamblea.

Se reconoce la  propiedad privada y se permite la inversión extranjera, con la cual  se espera reactivar la economía cubana estancada en este largo periodo de castrismo. 

El periodo presidencial será de cinco años, lo cual indica que la monarquía familiar establecida se acaba y el pueblo podrá elegir su presidente en forma indirecta como ya lo anotamos, a través de la asamblea.

Y como algo bien extraño en el texto constitucional aparece el matrimonio igualitario que permitirá a las personas del mismo sexo casarse.

Así que Cuba no se convierte en una nación capitalista y el capitalismo todavía está lejos de permear sus instituciones, pero no cabe duda que el regreso empieza y se da por los lados del socialismo clásico, en que los medios de producción quedan en manos del estado.

Es decir, la industria seguirá siendo controlada por el estado, pues es la que genera capital y la que produce la plusvalía que no admiten los principios socialistas.

 Pero en todo caso, se trata de una constitución que no durará mucho tiempo, pues el mercado se encargará de ir penetrando el mundo económico cubano, hasta que la sociedad deje de ser socialista y ahí sí, entre el capitalismo, como lo han demostrado Rusia y sus satélites.

sábado, 21 de julio de 2018

LA FRANCIA NEGRA


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Al principio uno se frunce, se echa para atrás y no entiende porqué un país como Francia tiene un equipo de fútbol a base de negros reclutados en sus colonias o como producto de la inmigración producida por los países africanos, pero luego encuentra cierta coherencia en la conformación de paradigmas, como el de la igualdad, en la sociedad francesa.

El equipo lo compone en su línea titular un total de 6 jugadores blancos y cinco de raza negra. Si uno deja por fuera a Mbappé se desfigura la esencia de ese futbol exhibido por Francia en este campeonato de Rusia 2018, pero también si deja por fuera a Griezman, también se desfigura el nivel de juego exhibido por el equipo. Lo que hace la fuerza, la técnica y el arte de esta selección es precisamente la integración de elementos raciales para producir un equipo que tiene la fortaleza de la raza negra y la inteligencia de la raza blanca.

Esto viene del siglo XVIII cuando los jacobinos franceses se levantaron contra la monarquía e instalaron el gobierno del pueblo y para el pueblo, mientras pasaron por la guillotina a toda una clase social, la nobleza, y les alcanzó para los monarcas y parte de los inventores de la fórmula. Y dijeron, aquí todos somos iguales, nada de aristocracia, nada de monarquía: el gobierno del pueblo y para el pueblo.

 Pero bueno… era la burguesía que se arrogaba el derecho de representar al pueblo.

Luego un país como Francia contempla problemas como la extensión territorial en la búsqueda de una hegemonía internacional y encuentra en el coloniaje una fuerza dispersa que quiere concretarla y asumirla como suya, unida a otro aspecto que ha sido recurrente a través de los tiempos, la inmigración, que ha hecho fuertes a países como Norteamérica y que Europa se resiste un tanto a ella, sobre todos en los sectores más conservadores.

Lo cierto es que tanto el coloniaje como la inmigración ha fortalecido los países y de ahí que uno de los beneficiados ha sido el fútbol.

Por eso, ese desconcierto inicial cuando ve que un equipo europeo, no tan racista como el alemán, pero si racista, se conforme en gran número por muchachos que son producto de sus colonias y de la inmigración, para luego entrar a explicarse que ese solo hecho no se hizo tan así, tan normalito, sino que necesitó de mucho tiempo de aclimatación y de imposición de ideas que en principio pudieron ser rechazadas, pero que terminaron imponiéndose, en la búsqueda del paradigma siempre presente en la sociedad francesa, como el de la igualdad.

Así pues, hay una Francia negra que ha venido haciendo sus aportes a la consolidación de Francia como potencia en todos los frentes y que de paso se ha venido manifestando en el fútbol concretamente.

Que se dé un Pelé en un equipo latinoamericano  es un  hecho normal, común y corriente, pero que se dé un Mbappé en el equipo de la sociedad francesa es un poco más insólito.

LA REINA SANTA.


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 
Ella viene precisamente de Grecia, tierra de la filosofía estoica que proporcionó al hombre mecanismos para superar los conflictos, las penalidades y problemas de la condición humana. Ella no da declaraciones ni produce gestos de rechazo, sino que absorbe todo como un secante y pasa por encima de toda clase de obstáculos para estar a la altura de su cargo y de su misión como reina y, de ahí también se desprende que va más allá de lo aguantable, de lo soportable, sin  que se sienta por ello fuera de lugar ante un espacio hecho para ella, a su medida.

Y luego pensaba seguir describiendo todas las penalidades sufridas por la reina santa: aguantarse la infidelidad de su marido Juan Carlos de Borbón, a quien los periodistas españoles le llevan contabilizadas cerca de cinco mil mujeres llevadas a la cama y sostiene una amante permanente por encima de todas las demás, sobre la cual se dice que el rey Juan Carlos tiene los títulos de propiedad de sus bienes, precisamente para sustraerlos del apetito fiscal.

Luego tiene que pasar por el calvario de una de sus hijas casada con Iñaki, quien ha sido condenado a pagar años de prisión por malas cuentas con el estado español y, actualmente se encuentra encarcelado. Y la Reina madre  tiene que pasar por la pena de ver a su hija en semejante tragedia y poner en peligro la misma estabilidad de la monarquía.

 Y como si fuera poco, ahora tiene que enfrentar a su nuera la bella reina Leticia, quien en público se atreve a que sus hijas no se retraten con su abuela Sofía y tiene en predicamentos mayores a su esposo el rey Felipe VI, quien no sabe qué hacer ante semejante dilema de apoyar a una u otra, en su papel de rey de España.

Entonces me fui a Google para encontrar datos de la vida de la reina madre griega y me encontré con que la santa andaba en malos pasos en amoríos con el viudo de la duquesa de Alba, la famosa mujer que con su desaliño y su fealdad había conquistado el corazón del mundo. Y está regado el chisme por toda la península y sus alrededores, pues luego de la muerte de la duquesa se les vio siempre juntos, acompañándose en sus respectivas penas y como caldo de cultivo para los periodistas que andan a la caza de noticias para sus lectores.

Y no alcanzaba a juzgar a la reina madre en esta salida que parece desafortunada, cuando volví unos pasos atrás y me puse a pensar si esto no estará urdido por la contraparte, la que  quiere dañarle el caminado a la reina madre, que ha aguantado estoicamente los embates de la familia, pues para cualquier ángulo que se mire, se encuentra en difícil predicamento, bien sea por los lados de su marido el Rey padre, de su hija y de su yerno, además de la reina titular Leticia Ortiz Rocasolano.

Al encontrarle otro pero al pero inicial, le doy tregua a la reina y sigo en el plan de descubrirle su verdadero perfil. ¿En dónde estará la verdad?  

jueves, 12 de julio de 2018

LA NOVELA DE CLINTON Y DE PATTERSON


POR RAUL PACHECO BLANCO

Como lector uno tenía la ilusión de asistir a clases de primera mano sobre la geopolítica norteamericana con la novela del expresidente Clinton y el novelista James Patterson. Y sobre todo, vivir el ambiente de la casa Blanca, lleno de recuerdos y de acontecimientos.

Al principio se hacía cábalas sobre el papel que desempeñaría tanto un autor como el otro, y se repartirían el trabajo. El uno suministraría la materia prima, la política internacional recién horneada y el otro relataba a su estilo y capricho.

 En los capítulos iniciales se entra de lleno en la vida política norteamericana y  se insinúa el juego que va a tomar el relato y por lo tanto se espera asistir a un banquete de la alta política.

 Se van pasando las páginas y se agotan las posibilidades de entrar de lleno en la política, en la alta política norteamericana y se mete por el camino del mundo virtual, que es el dominante en la actualidad, para empezar a la tejer la novela policíaca propiamente dicha.

Es cuando Patterson se adueña completamente de la novela y despoja a Clinton de su lugar, cuando había tenido tanto cuidado de permanecer en el relato, porque no solamente se guardó el papel de narrador, sino de personaje principal, como presidente de los Estados Unidos.

Pero Patterson le da golpe de estado y lo despacha de una como narrador, mandándolo a la lona.

Fuera de verificar una vez más sobre los aliados y los adversarios de los Estados Unidos, no se adelantan mayores conocimientos sobre política internacional. Es bien sabido que Israel ha jugado un papel  preponderante como aliado permanente de Estados Unidos, así como Rusia sigue siendo la bestia negra, no obstante por las que ha pasado: del régimen soviético, con su ideología a bordo y su correspondiente colapso y ahora, dentro de una nueva época, en que los capitalistas rusos también han hecho su aparición.

Nos quedamos pues con los crespos hechos para aquellos a los que nos gusta acercarnos a la política internacional, al juego de las potencias y a uno que otro secreto presidencial.

No somos expertos en novela policial y de ahí que pasemos derecho en cuanto a apreciaciones de ese carácter. Perdimos el tiempo y sobre todo, dejamos de lado el principio de no comprar estos best sellers sino en ediciones piratas.

 

 

viernes, 6 de julio de 2018

EL CASO MOCKUS


POR: RAUL PACHECO BLANCO

 El caso Mockus refleja la situación de un académico que decide entrar a la política, sin tener los medios económicos para lograrlo. En política si no se tiene la plata para hacerla, tiene que padecerla. Ahora no es como antes, cuando se podía hacer política con un bagaje intelectual y unas condiciones de comunicación que hicieran fácil el acceso a la voluntad popular. El bagaje intelectual es ahora lo de menos para acercarse a la vida pública.

Por eso Mockus se vio ante el fracaso electoral y al contemplar la perspectiva inmediata de  seguir o retirarse, cedió a su impulso de seguir en la contienda política y vinieron los apoyos de gobierno para flotantizarlo, a base de contratos. Con esos contratos encontró la supervivencia pero se llenó de incompatibilidades. Lo llenaron de contratos y él muy solícito, cumplió  con todos los objetivos contemplados en ellos. Pero sin tener en cuenta que estaba cavando su propia sepultura.

Y para colmo de males, el profesor Antanas Mockus se enfermó. La lucha  en esa forma adquirió un perfil dramático, pues además de tener que superar el problema económico, ahora tenía que hacerle frente al de salud. Y optó por seguir adelante. Ya cuando se echa toda la carne al asador no queda intención alguna de volverse atrás. Entonces se va volviendo práctico y empieza a dejar a un lado las arandelas de otro tipo, los conceptos de moralidad y de ética se van borrando del mapa mental y solo aparece el hecho escueto que le garantiza su permanencia en la política.

Pero viene lo peor, que es el cuestionamiento que hace la ciudadanía y la pérdida de las viejas banderas de la honorabilidad. De ahí en adelante la ciudadanía le pasa la cuenta de cobro por la declinación de los ideales que lo proyectaban ante la comunidad y le garantizaban el seguimiento y el ejemplo moralizante.

Ya no puede seguir usufructuando de esa aureola de profeta mayor y de ejemplo para sacar adelante el modelo del político con ideas, pero con principios. La única salida elegante que le queda a Antanas Mockus para seguir actuando en la vida pública, con el prestigio con que ahora tiene, es que renuncie a su curul y reconozca  que se equivocó. Lo contrario, perdería la credibilidad que había conquistado y se convertiría en un político del montón, sin la aureola que ostentaba.