sábado, 12 de junio de 2010

ANATOMIA DE UN INSTANTE DE JAVIER CERCAS



POR: RAUL PACHECO BLANCO

Javier Cercas ha tratado de salirse de la novela para meterse de lleno en la realidad, trayendo testimonios de hechos verificables, evitando meterse en la ficción que es el terreno de la novela, con el fin de enriquecer un pasado determinado, con un criterio histórico. O con un criterio periodístico.
Es lo que ha hecho en sus dos libros más divulgados, Los Soldados de Salamina y Anatomía de un instante.
A él le llaman la atención los gestos, las actitudes que en un momento dado tienen las personas, con intenciones escrutables y que han cautivado a Cercas para hacer investigaciones muy serias para luego contar el cuento completo.
En los soldados de Salamina le intriga porqué un soldado enemigo le perdona la vida a un conocido jefe falangista durante la guerra civil española y ese interés lo lleva a tratar de descubrir esa intención.
Y en Anatomía de un Instante, es el gesto de Adolfo Suárez de permanecer en su asiento de jefe del gobierno, mientras el coronel Tejero se tomaba el recinto del Congreso y se establecía un tiroteo, que llevó a todos los demás ministros y parlamentarios a tirarse en el suelo y a protegerse a como diera. A excepción de Suárez, su vicepresidente el general Gutierrez Mellado y el líder comunista Santiago Carrillo, todos los demás, se tiraron al suelo.
Llama la atención si, desde el primer momento, una cierta ambigüedad del autor, pues al presentar a Adolfo Suarez uno no sabe si trata de elogiarlo, o de escarnecerlo. Tan pronto da una idea, como la borra, para dar otra.
Esto viene uno a entenderlo, cuando sabe que Cercas fue un joven de izquierdas, mientras su padre era un falangista y un suarista consumado. Esa dualidad es la que le lleva a tratarlo de un chisgarabís trepador, que se hizo amigo del príncipe , Juan Carlos de Borbón , para hacerse a la jefatura del gobierno español, para luego situarlo históricamente como el fundador de la democracia española.
Si uno quiere conocer de cerca la personalidad de Adolfo Suárez y lo que pasó en aquel momento de crisis, pero también de un periodo como el de transición española, no creo que exista un texto histórico que sea tan completo en meterse en la urdimbre de los hechos y de las personas, para llegar a comprender el momento histórico y el material de que estaban hechos los personajes.
El perfil de los protagonistas del golpe, queda allí muy bien delimitado y definido, sobre todo en lo que se refiere a Suárez. Por allí pasan el ahora rey Juan Carlos, quien debeló el golpe, los generales Armada, Gutiérrez Mellado, Milans, Cortina y el coronel Tejero.
Para Cercas el golpe vino a fracasar, porque los protagonistas no se pusieron de acuerdo en el momento crucial. Mientras los generales Armada y Milans querían dar un golpe blando, sin violencia, el coronel Tejero quería darlo duro, apelando a la violencia. Los primeros querían llevarse de calle únicamente al presidente Suárez, pero en beneficio del rey Juan Carlos. Mientras que Tejero quería darlo contra todos. Ese desacuerdo los mató y el rey entró a maniobrar para hacer abortar el golpe.
Pero el mérito de Cercas está en darle tal dinámica a la narración, que aquello se convierte en novela y el lector no tiene más remedio que dejarse llevar por la dinámica del relato.
Así que es una obra que hay que tener en cuenta, por la seriedad de la investigación, por la sinceridad de su postura ante hechos y personajes y por esa dinámica narrativa que se eleva más allá, de cualquier crónica de prensa o de cualquier texto histórico.
Lo que si creemos, es que se le va la mano en lo extenso de los párrafos .

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