viernes, 26 de agosto de 2011

SOCIEDAD SOLIDARIA DE DERECHO

POR: RAUL PACHECO BLANCO.


Tanto la izquierda como la derecha han explorado en todas las formas posibles el estado. Es decir, su mensaje ha sido dado o proyectado desde el estado.
La izquierda agotó todos los espacios con el comunismo en donde el estado se dedicó a solucionar los problemas del hombre en cuanto a su bienestar material, pero no bajo el punto de vista de sus libertades. El socialismo igualmente exploró espacios y dejó un margen para la libertad. La derecha a su vez se ha hecho fuerte a través del estado, hasta llegar a su máxima expresión, como lo fueron los fascismos, o las dictaduras . En Latinoamérica somos expertos en estos ultimo : en las dictaduras. Pero a su vez si la derecha copó todos los espacios políticos con relación al estado, dejó las puertas abiertas para que entrara el capital, los grandes empresarios y le cerró la puerta a los de otras clases, incluido el pueblo y la clase media. Y se ha ensayado también a suavizar las propuestas, como pasar del comunismo al socialismo democrático o la socialdemocracia en la izquierda y del fascismo a las dictaduras o a los gobiernos fuertes de tipo conservador.
La izquierda abrió camino con relación a las libertades públicas con el socialismo y con la socialdemocracia, sin descuidar o por lo menos, con menos carne , en relación a las conquistas sociales, incluyendo la vivienda, la educación, el empleo y la salud. La derecha igualmente se defendió con el liberalismo, tipo colombiano, en que si bien es cierto se parte de un discurso de plenas libertades, no por ello se deja en manos del gran capital el poder. Y los conservatismos se convirtieron en social cristianos, luego de la segunda guerra mundial, cuando Adenauer y De Gásperi llevaron tanto a Alemania como a Italia por un estado de bienestar que ya en el siglo anterior habían explorado Bismark y La Salle , preservando eso si las libertades individuales según los primeros y restringiéndolas, según los segundos.
De ahí que consideramos que la via del estado se encuentra agotada, sin que hubiera logrado sus propósitos : la extrema izquierda, o sea el comunismo, hizo implosión y demostró que no era viable. Y el socialismo tampoco, Le sonó la flauta si a la socialdemocracia, pero ya agotó su esencia. Dígalo sino la Tercera Via.
Y la derecha llegó hasta el desmantelamiento total del estado, dejando en manos del mercado todas las decisiones, que ya sabemos hasta donde se llega en ese llanito.
Es el ciclo que estamos viviendo desde el neoliberalismo impuesto por Reagan y la señora Thatcher y luego adoptado hasta por la socialdemocracia, como fue el caso de Alan García en el Perú, de Carlos Andrés Pérez en Venezuela y el peronismo en Argentina.

Lo cual quiere decir, que debemos explorar por los lados de la sociedad : tratar de redistribuir las funciones, invertir la carga de la prueba. Que sea la sociedad la que haga el trabajo del estado en cuanto a la satisfacción de las necesidades primarias de la gente y que el estado se convierta en un ente fiscalizador.
Hasta ahí la cosa estaría simple o plana. Pero la gran apertura que se debe hacer es que desde la sociedad parta la solución de los problemas existenciales de la gente y no del estado como ha venido ocurriendo. Las grandes empresas entrarían a cumplir la función que antes cumplía el estado, dando al trabajador no solamente el empleo y su sueldo, sino además, educación, seguridad social y ayuda para la vivienda. La financiación vendría de una rebaja proporcional de los impuestos que pagan al estado actualmente. Y como una sola empresa no puede llevar adelante estos planes, solidariamente se unirían con otras para crear o comprarle al estado las empresas que se dedican a realizar tales actividades.
La idea central sería que así como hoy las empresas dinamizan la economía, sean ellas también las que proporcionen el bienestar de sus trabajadores. El estado se convertiría en una gran contraloría.

No hay comentarios: