Por: Raúl Pacheco Blanco
Mañana Venezuela decide si continúa siendo un país capitalista o se convierte en uno socialista. Este paso, por lo menos en cuanto al texto de la constitución por aprobar no implica la llegada al sistema comunista de Fidel Castro, pero se lo deja a la puerta del horno. El pueblo Venezolano dirá si en la puerta del horno se quema el pan.
Si no se quema, la constitución consagraría en lo político, un estado federal, de pronto desfigurado porque no aprueba constitución para los estados, sino apenas la elaboración de unos estatutos, que son los que se estilan en el sistema autonómico español y tampoco consagra una autonomía fiscal. En la forma de gobierno se amplía el presidencialismo, ese si de origen bolivariano, por cuanto el Presidente entra a manejar la política monetaria en orden a lograr los fines del estado socialista. El Banco Central por lo tanto no tendrá autonomía, como la tiene por ejemplo el Banco de la República en Colombia y está sujeto a un plan de desarrollo elaborado por el ejecutivo. Además el presidente es el encargado de los ascensos en los grados y jerarquías de la Fuerza Armada Bolivariana, lo que le dará un control mayor al Presidente sobre las Fuerzas Armadas. Igualmente administra la Hacienda Pública, las reservas internacionales y como lo hemos visto, la regulación de la política monetaria, y designa al Procurador general de la República. Y como si fuera poco, trae del sistema parlamentario la facultad de disolver la Asamblea Nacional, único órgano legislativo , porque Venezuela abandonó el sistema bicameral, sin la contraprestación que equilibra el juego entre los poderes, en el sistema parlamentario, como la destitución del Primer Ministro, o sea, del ejecutivo. Consagra también la constitución el antiimperialismo y una democracia formal, por cuanto tiene sistema de leyes, tridivisión del poder y régimen electoral, pero con una concentración de poderes en el Presidente, que rompe el equilibrio. En lo económico establece el socialismo para darle al estado el suficiente juego , en orden a hacerse al control de la propiedad, que tendrá las siguientes categorías: pública, social, colectiva., mixta y privada. La joyas de la corona serán, además de la primera, la social y la colectiva, porque mediante ellas se pueden apropiar bienes a favor de las comunidades o de las comunas, mediante la expropiación por razones de interés general, previa indemnización que se puede pagar con bonos del Estado. Y la colectiva para dar propiedad a grupos sociales o personas. La propiedad privada se reconoce sobre bienes de uso, consumo y medios de producción legítimamente adquiridos.
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En el socialismo clásico el Estado se apropia de la industria, pero deja el comercio, la agricultura y los servicios en manos privadas.
Aquí da la impresión de seguir esa pauta, pero prohibiendo sí, el latifundio , que pasará a manos del Estado , o de empresas públicas, cooperativas, comunidades u organizaciones sociales.
Los campesinos pueden ser dueños de sus tierras, siempre y cuando sean productivas.
En cuanto a vivienda se tiene derecho a una sola vivienda, pero no es obligación del Estado proporcionar a quien su vivienda, porque debe ser el resultado conjunto de la acción del Estado y la persona, en forma progresiva y no automática.
El suelo urbano cumplirá una función social y se prohíbe toda acción especulativa respecto a la renta de la tierra.
La ley se encargará de establecer las condiciones para la creación de empresas o entidades regionales bajo los principios de la economía socialista.
La política comercial se enderezará a defender y promover las actividades de las empresas públicas, comunales, mixtas , colectivas, sociales y privadas.
En cuanto a la exploración y explotación de los hidrocarburos se constituirán en un monopolio del Estado y las empresas de éste género no podrán ser privatizadas total o parcialmente.
En lo social continua el policlasismo, es decir, no se prohibirá la existencia de las clases sociales, pero el Estado buscará el equilibrio , protegiendo a los sectores en desventaja para dotarlos de propiedad y demás beneficios.
La educación será gratuita en los establecimientos del Estado , hasta el pregrado universitario .
Los trabajadores en el sector servicios como taxistas, barberos, artesanos, etc, tendrán un Fondo de Estabilidad Social para garantizarles sus jubilaciones, pensiones, vacaciones, reposos pre y post natal.
La jornada de trabajo se reduce a 6 horas diarias o 36 semanales y no se podrá obligar a los trabajadores a laborar horas extras.
En el área cultural , se reconoce la trietnia que ha dado lugar a la venezolanidad , de raíces indígenas, europeas y africanas.
En el aspecto religioso , aunque no se dice nada nuevo, bien se sabe que el Estado es laico, más dentro del laicismo, que es beligerante con la iglesia, que de la laicidad, más tolerante .
Para no abandonar el proyecto bolivariano , se promoverá la integración latinoamericana y del Caribe, en la búsqueda de una Confederación de paises, que es la aspiración de la mayoria y tiene ya en sus cartas constitucionales esa aspiración, como es el caso de Colombia.
Y como gran paradoja , se establece que una reforma constitucional consiste en una revisión parcial , sustitución, supresión o adición de una o varias de sus normas que no modifiquen la estructura y principios fundamentales del texto constitucional , que es precisamente lo que se está haciendo con el referendo, al cambiar una de sus bases fundamentales que es su sistema político-economico.
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