viernes, 27 de junio de 2014

EL CAMPEONATO MUNDIAL DE FUTBOL

POR: RAUL  PACHECO  BLANCO.

 
Tal vez el mejor mundial que ha habido hasta ahora  haya sido el de México 70, cuando irrumpíó  la selección brasileña con un Pelé jovencito haciendo malabares con la pelota y  goles increíbles. Pero el de ahora tiene el valor  de romper muchos esquemas. Eso de ver que Costa Rica le gane a Uruguay  y lo repita con Italia, ya de por sí  dice mucho. Las fuerzas de los equipos se han nivelado. Ya no existe la hegemonía de antes, cuando se sabía quién o quiénes iban a  ser los ganadores. Y la diferencia de estilos : antes los europeos jugaban a toda máquina. Y los suramericanos con el pasito lento de los brasileños y el toque toque de los argentinos. Ahora los estilos se han mezclado: España retomó el toque toque pero con arietes que se metían por el centro con ganas de hacer gol. Y ese estilo maduró en el Barcelona hasta que rindió todos sus frutos y tuvo entierro de tercera en este campeonato. Pinto adoptó el estilo europeo de ir con todo hacia el gol, dejando de lado las paredes.

Colombia abandonó  el cuento de que había un estilo colombiano, el de Maturana, ahora revaluado, y dejó el jueguito de medio campo en donde se pensaba más en retener el balón que en buscar el gol. El gol no era importante, lo importante era el espectáculo. Aquí en Bucaramanga hubo un jugador que llegó  con muchos pergaminos porque jugaba un futbol de alta calidad que consistía simplemente en devolver de primera cualquier pase que recibiera : era un tenista.

A otro jugador también importado de Argentina al no dar rendimiento solo atinó a decir : che, es que yo soy un científico. Como siempre, los holandeses  tratan de innovar. En esta ocasión volvieron con un fútbol supersónico, como si en la delantera hubieran puesto velocistas de cien metros planos de nueve segundos y encontraron a una España en decadencia con  el pasecito corto o de media distancia, pero  sin un  Messi que prestara el servicio de ariete para romper defensas. El fútbol africano que tantas expectativas ha venido creando, se ve muy sólido en Costa de Marfil y en Ghana que puso en aprietos a Alemania, con todo su plantel. Francia aporta un Bencemá que hace recordar a  Zidane. Brasil con un juego lento,  pero de remates insólitos que pueden definir un partido en el momento menos pensado. Y otras grandes revelaciones : México y Chile.

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