PATOLOGÍA DEL LIDER.

 

POR: RAUL  PACHECO   BLANCO.

 

El líder ha sido definido como aquella persona con mucho carisma que es capaz de conducir a las personas y a las masas hacia unas metas muy puntuales. Y que dentro de ese líder existe una personalidad extraordinaria, fuera de serie, dotado de tal energía que hace que las cosas se hagan no más que al conjuro de su palabra y de sus órdenes. Ni siquiera de sus órdenes. Y además que tiene unas convicciones y unas ideas motoras irresistibles. Y un carácter por encima de cualquiera otra consideración. Pues no, para el filósofo italiano Umberto Galimberti el  líder solo es un cascarón que recibe toda clase de impulsos desde afuera y él como un  robot no hace  más que responder a esas presiones y poner al servicio de su cumplimiento todas sus energías. Allí  no hay carácter alguno. Todo lo contrario, su  papel se limita a tomar la dirección que le es indicada, sugerida o impuesta. Así  que el líder no tiene personalidad pues está lleno de cometidos ajenos. Su personalidad esta precisamente en no tenerla. Como la política es cambiante, el líder tiene que cambiar cuantas veces sea necesario, no importa las veces que sean.  Señala Galimberti “ que los lideres saben que son amados por lo que no son y saben que el no ser es su elemento constitutivo, apenas compensado por una superadaptación a la realidad externa que bloquea el mundo de la imaginación y los restos  de sentimientos que crecen con dificultad en sus áridas almas” (pag 151).El psiquiatra Boston Peter  habla del síndrome patológico del líder , que reside en lo que él llama alexitimia , que es la incapacidad de  hallar las palabras para descubrir sus sentimientos y, más allá del funcionamiento impecable , la esterilidad emotiva, la monotonía de las ideas y un grave empobrecimiento de la imaginación., no hay más ná, como dicen los costeños.. Aquí el lector puede hacer sus acercamientos a líderes que conozca  para ver si clasifican .¿  A quién se les parece? Y a su vez los psiquiatras Belinda Board y Katarina Fritson  tomaron 35 líderes de éxito y los compararon con otro número igual de criminales y pacientes psiquiátricos graves para encontrar que  estaban identificados en su falta de escrúpulos , de responsabilidad, de sentimiento de culpabilidad y con una acentuada tendencia a la mentira, a la manipulación y al cinismo. De ahí que  clasificaran a los  líderes como psicópatas con éxito y a los criminales sicópatas  sin éxito.