De Francisco Santos, el exvicepresidente se dice que es un hombre bueno. Subvalorado sí
por su familia y el Tiempo, al cual solo
le daban un cariño fraternal, como de
hermano menor, pero sin que lo consideraran para grandes destinos. Por eso se
quedaron perplejos cuando el presidente Uribe lo escogió como fórmula viceprsidencial. Claro está que
para es asa época la familia Santos todavía era propietaria de El Tiempo.-
Pachito no es capaz con eso, dirían en la redacción de El Tiempo. Y como
vicepresidente lo hizo bien, con una que otra impertinencia, pero bien. Además,
a él le quedó gustando el poder. Por eso con toda seriedad se fue a la convención
del uribismo creyendo que le iban a
jugar limpio y que él sería el escogido, pues para eso ya había sido
vicepresidente y por lo tanto estaba empapado de los problemas del estado. Empezaba
pues, a pisar terrenos de estadista.
Desde luego, pecaba de iluso pues Uribe no se dejaba capar dos veces y menos, de
la misma familia, que todavía resultaba peor. Los programas de humor siempre
resaltan su personalidad como de niño grande, de hombre cálido-restallante,
como decía Joyce.
Pero desconocían otro aspecto de su personalidad : un carisma especial, no de corte degolliano o napoleónico, pero si con una capacidad de
llegada a la gente, con una receptibilidad popular muy especial. La gente lo
quiere , entre otras cosas, porque lo
cree honesto y que nunca los va a engañar, porque los niños no dicen mentiras ,
ni engañan. . Y dicen las cosas por su nombre , como cuando logró
que una política tan cotizada como la Chiqui Araujo, se cayera del ministerio
en el gobierno de Uribe. Eso le gusta a la gente. Ahora se ha metido a liderar
el sí en la revocatoria de Petro. ¿ Qué busca?. Quizá la alcaldía de Bogotá para la cual se siente
sobrado y que da cierto tono de administrador. Allí se forjó Virgilio Barco. Y de allí salió el prestigio de Jaime Castro, Antanas Mockus,
Enrique Peñaloza y Lucho Garzón y de donde nace la vía hacia la presidencia. La
alcaldía de Bogotá hace presidenciables.
Ahora en la campaña por el si sobre la revocatoria de Petro va en coche ,
porque si gana el sí , es triunfo suyo y si pierde, será una derrota de
Miguel Gómez . Así que va en coche. Sobre todo tiene una espina adentro y es la de demostrarle a su primo Juan Manuel, que
él también puede hacer lo mismo que él
hace, es decir, que puede llegar a ser presidente. ¿ De dónde? . Quién sabe.
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